Un simple lavado de manos con jabón, cada vez que sea posible, salva no solamente la vida de quien lo hace, sino la de otras personas. Una atención limpia es una atención segura.
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La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró el 5 de
mayo como el Día Mundial de la Higiene de las Manos. El lema de este año
expresa «Una atención limpia para todos – está en sus manos». Por ello, el
Ministerio de Salud, a través de la Dirección General de Vigilancia de la Salud
(DGVS), insta a profesionales de la salud al lavado de las manos como hábito
imprescindible para reducir la transmisión de enfermedades infectocontagiosas.
La higiene de las manos es un indicador de calidad que
destaca la seguridad de los sistemas de salud. En el caso del profesional de la
salud, existen cinco 5 momentos a tener en cuenta para desinfectar las manos:
1- Antes de
tocar al paciente.
2- Antes de
un procedimiento limpio o aséptico.
3- Después
del riesgo de exposición a fluidos.
4- Después
de tocar al paciente.
5- Después
del contacto con el entorno del paciente.
No menos importante es la higiene de las manos en la
comunidad, como método efectivo para la prevención de enfermedades diarreicas y
neumonías, infecciones cutáneas, infecciones a los ojos, parásitos intestinales
entre otras.
Los momentos claves del día para higienizar las manos con
agua y jabón son: antes de cocinar o preparar alimentos, antes de comer y
después de ir al baño.