La escoliosis, una desviación lateral de la columna vertebral en forma de S o C, no sólo produce una deformidad estética que impacta emocional y psicológicamente en el niño, adolescente e incluso el adulto que la padece, sino que sus complicaciones pueden alcanzar órganos vitales como los pulmones y el corazón. Por ello su detección y tratamiento precoz es de suma importancia.
Según su origen, la escoliosis puede ser congénita, neuromuscular e idiopática. En un 80% de los casos, la escoliosis es de origen idiopático, es decir, no se conocen las causas y en su mayoría, ocurre en adolescentes en periodo de desarrollo físico y es que, en esta etapa, el crecimiento musculoesquelético es tan rápido que pueden presentarse una serie de descompensaciones en la columna. El doctor Cristian Miltos, neurocirujano especializado en la columna del Hospital de Trauma de Asunción, explicó que en la medida que la caja torácica se desarrolla y crece, así también lo hacen los alvéolos de los pulmones, los cuales logran la madurez alrededor de los ocho años de vida, entonces, si la escoliosis se presenta a una temprana edad, en un caso grave la caja torácica puede presionar contra pulmones y el corazón, haciendo más difícil la acción de respirar y el bombeo del corazón. Es así que la escoliosis no tratada o detectada a tiempo, no sólo es un serio problema para los niños o adolescentes que la padecen de manera psicológica, ya que no pueden usar una ropa ajustada o son víctimas de “bullying” en sus escuelas debido a su apariencia, sino que lo más más grave es la escoliosis, podría llevarlos a sufrir enfermedades cardíacas o pulmonares que no permitan la vida a largo plazo de quienes la padecen. La prueba clínica inicial más utilizada para detectar esta desviación de la columna es el “Test de Adams”. La misma consiste en el que el niño o adolescente se dobla hacia delante, manteniendo las piernas derechas, elevando ambos brazos. Dicha acción revela si una parte de la columna presenta anormalidades en las costillas o espalda. Si bien esta prueba no evidencia la severidad de la enfermedad permitirá que el médico tratante solicite la radiografía del paciente para la identificación del tipo de tratamiento y en el peores de los casos una radiografía. La enfermedad, afecta a hombres y mujeres en la misma proporción, sin embargo, la diferencia radica en que las mujeres padecen las mayores curvas en 8 a 1, uno puede llegar a operar 8 niñas por un niño. Situación de la escoliosis en Paraguay En Paraguay aún no existen registros oficiales que demuestran el número de personas con la enfermedad en etapa de tratamiento, sin embargo, el Dr. Miltos, informó que alrededor de 35 a 40 chicos ya fueron diagnosticados con la enfermedad, sin contar aquellos que viajan al exterior para su tratamiento. Hasta la fecha, ya se han practicado alrededor de 20 cirugías en hospitales públicos y privados, algunos de ellos son: el Hospital Central del Instituto de Previsión Social (IPS), el Hospital Nacional de Itauguá y el Hospital de Clínicas de San Lorenzo. El costo del procedimiento en el sector privado oscila entre los G. 100 a G. 120 millones, sin contar la prótesis cuyo valor estimativo es de G. 50 millones. Desde el pasado mes de junio, el Ministerio de Salud a través de la Dirección de Atención Primaria de la Salud (APS) realiza una serie de actividades de promoción y prevención de manera a informar a la población en general, sobre las características, causas y tipos de tratamientos a ser aplicados en caso de padecerla. Así mismo, la APS, prevé trabajar con la Dirección de la Salud Integral de la Niñez y la Adolescencia (DIRSINA) sobre el Test de Adams, de manera a que este pueda ser incluido como uno de los requisitos dentro de la inspección médica escolar, realizada anualmente, para así lograr el diagnostico precoz de la enfermedad y mejorar la calidad de vida de los niños y adolescentes. Test de Adams, una prueba oportuna para detectar la escoliosis