Recomendaciones para prevenir enfermedades diarreicas y deshidratación

La medida de higiene más efectiva es el lavado de manos frecuente con agua y jabón al llegar de la calle, antes de preparar alimentos, antes de consumirlos, después de tocar alimentos crudos, después de ir al baño y después de cambiar pañales.


La Dirección General de Vigilancia de la Salud, dependiente del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social, recomienda a las personas las siguientes medidas para evitar enfermedades diarreicas:

Beber agua potable, hervida o clorada.

Si el agua no es potable, hervirla o agregar 2 gotas de lavandina por litro de agua, para su uso.

Lavar con abundante chorro de agua las verduras y frutas, ya sea para consumo, y/o para cocinar.

Utilizar cuchillos diferentes para alimentos crudos (verduras) y cocidos (carnes), tanto para la preparación de los mismos como para su posterior limpieza. 

Lavar correctamente carnes y vísceras antes de su preparación.

Cocinar muy bien los alimentos, sobre todo pescado y mariscos.

En caso de utilizar leche no pasteurizada, hervirla antes de beberla, durante al menos 3 minutos.

No consumir alimentos después de su fecha de vencimiento.

Limpiar los productos enlatados o que estén en frascos de vidrio, antes de abrirlos y consumirlos.

Mantener los alimentos tapados y en refrigeración. No dejar a temperatura ambiente por más de 2 horas.

Evitar estornudar, tocarse la nariz, toser o escupir frente a los alimentos. 

Si usted opta por comer en lugares públicos, se debe asegurar que los establecimientos cuenten con instalaciones limpias. 

Desinfectar correctamente los baños (preferentemente con agua y lavandina). 

La medida de higiene más efectiva es el lavado de manos frecuente con agua y jabón al llegar de la calle, antes de preparar alimentos, antes de consumirlos, después de tocar alimentos crudos, después de ir al baño y después de cambiar pañales.

La diarrea se caracteriza por evacuaciones frecuentes de heces sueltas o líquidas, en las cuales existe una pérdida de sales (electrolitos como el sodio, cloruro, potasio y bicarbonato), que son importantes para mantener el estado de hidratación. La diarrea suele ser un síntoma de infección del tracto digestivo ocasionada por virus, bacterias o parásitos que se adquieren al consumir agua o alimentos contaminados, o bien, de una persona a otra por una higiene inadecuada, por vía fecal-oral (ano-mano-boca).

Los bebés, niños, adultos mayores y los enfermos tienen mayor probabilidad de deshidratarse al padecer enfermedad diarreica. Los síntomas de deshidratación son: boca reseca, cansancio, ausencia de lágrimas, ausencia o disminución de la orina.

Para evitar la deshidratación, se sugiere acudir a revisión médica ante cualquier síntoma.

Seguir las recomendaciones del médico y guardar reposo en casa.

Mantener estrictas normas de higiene, especialmente en la preparación y consumo de alimentos. 

Si se trata de un bebé, se recomienda continuar la lactancia materna. En caso de que ya esté recibiendo alimentos sólidos, continuar con su alimentación habitual, ofreciendo alimentos con mayor frecuencia. Dar de comer y beber después de la diarrea y estar al pendiente de que no se deshidrate. Si usa pañal, asegurarse de cambiarlo con frecuencia y depositarlo en botes de basura con tapa.

Ante cualquier síntoma, consulte a su servicio de salud más cercano.