Ellos trabajan en la USF y son nexo entre el servicio de salud y la comunidad asignada. Actualmente y en todo el país, estos agentes desarrollan censos comunitarios, en estricto cumplimiento de las medidas de protección ante la pandemia por COVID-19.
Las actividades que desarrollan los ACS contribuyen a mejorar la calidad de vida, promueven la conservación de la salud, refuerzan el papel de los servicios de salud en la comunidad, promueven la participación y movilización comunitaria además de facilitar la relación y acercamiento a la comunidad a los servicios de salud. Del censo, una de las actividades llevadas adelante por estos agentes, se extraen datos como factores de riesgo domiciliario susceptibles de vigilancia y en un mapa se pueden consignar datos de niños con problemas de nutrición, embarazadas, personas con diabetes, hipertensión, discapacitados, etc. Estos censos son de suma importancia ya que los datos obtenidos en esta reunión, entre el agente y las familias, son cargados en una base de datos que se actualizará permanentemente para que sea accesible y pueda realizarse la planificación y preparación de proyectos. Es importante señalar que los agentes que efectúan el censo deben saludar correctamente a los pobladores, presentarse como funcionarios del Ministerio de Salud, explicar el motivo de su visita, el objetivo del censo y solicitar a los pobladores su consentimiento sobre esta actividad. Actualmente, teniendo en cuenta la situación ante la pandemia por COVID-19, todos los funcionarios de los servicios mantienen las medidas de protección requeridas.