Que no te engañen: vapear es tan dañino como fumar cigarrillo

La nicotina utilizada en este dispositivo al igual que en otros cigarrillos electrónicos puede dañar el cerebro y producir enfermedades respiratorias y hasta desencadenar la muerte.



A pesar de su implicancia negativa sobre la salud, todavía no se cuenta con regulación para la venta de vapeadores y de esta manera impedir que los adolescentes y jóvenes acceden a este tipo de dispositivo electrónico, señala la doctora Zunilda Palacios, directora del Programa Nacional de Control del Tabaquismo y Enfermedades Respiratorias Crónicas.

El uso de vapeador se está convirtiendo en la puerta de entrada al tabaquismo. Los jóvenes comienzan a probarlo y así van adquiriendo la adicción.

“Queremos que la población joven sepa de los efectos dañinos que también producen los dispositivos electrónicos como los vapeadores. Explica que el cigarrillo electrónico al igual que el cigarrillo convencional es altamente adictivo y riesgoso para la salud por las sustancias carcinógenas contenidas en el dispositivo, como las nitrosaminas y otros químicos como el dietilengico. Puede afectar el cerebro, así como cualquier tejido del organismo y producir trastornos y enfermedades que pueden llegar a ser letales.

Palacios advierte que vapear, además de incidir estrechamente sobre la salud del consumir, también afecta al entono que no fuma, pero que indirectamente está inhalando el humo de estos dispositivos.

En el país, el 14,5% de la población es fumadora de productos de tabaco, mientras que la prevalencia del consumo de vapeadores asciende a 12,5%, mayoritariamente son jóvenes.

Para dejar de fumar, la neumóloga expone que no existe evidencia que los dispositivos electrónicos sean realmente efectivos para el abandono del hábito tabáquico. Recomienda a los que quieran dejar de fumar, recurrir al profesional de salud.

Cifras

En Paraguay, en el 2019 se llevó a cabo la Encuesta Mundial sobre Tabaco en Jóvenes (EMTJ), a estudiantes del 7mo., 8vo., y 9no. grados (de 13 a 15 años), cuyos resultados arrojaron que:

El 8,1% de los estudiantes consume algún producto de tabaco: 8.8% son varones y 7,2 % mujeres.

El 7,2% fuma tabaco: 7,4% varones, 6,8% mujeres.

El 3,0% fuma cigarrillos: 2,7% son varones y 3,3% mujeres.

El 1,7% consume algún tipo de tabaco sin humo (entre ellos IQOS): 2% son varones y 2,8% mujeres.

El 12,5% utiliza cigarrillos electrónicos (vapeadores): 14% son varones y 11,1% mujeres.

Es importante que la población sepa que:

Los adolescentes que consumen cigarrillos electrónicos (vapeadores) tienen al menos el doble de probabilidades de fumar cigarrillos normales más adelante en su vida.

La nicotina de los cigarrillos electrónicos es una droga altamente adictiva y puede dañar el cerebro en desarrollo de los niños y producir enfermedades respiratorias.

Los IQOS, dispositivos para fumar tabaco sin humo son igual de dañinos que los cigarrillos convencionales.

Fumar pipas de agua es tan dañino como otras formas de consumir tabaco.

El tabaco de mascar puede provocar cáncer de boca, manchas y pérdida de los dientes.