Dentro del Informe de Gestión Presidencial, el Mandatario Nacional Mario Abdo Benítez, expresó que el Paraguay tomó medidas inmediatas ante la amenaza de COVID-19 y que se busca mantener la curva aplanada.
Paraguay fue el primer país de la región
en declararse en cuarentena tras la confirmación del segundo caso en el
territorio, el 10 de marzo del corriente año. Desde ese momento, se estableció
un seguimiento estricto al protocolo sanitario que el Gobierno Nacional
desarrolló en conjunto al equipo técnico de la cartera de ministerios. Fueron las primeras acciones: el
aislamiento social, la suspensión de clases, y la suspensión de eventos
públicos y privados de concurrencia masiva. La circulación de las personas
desde la declaración de emergencia tuvo restricciones; se ordenó el cierre de
fronteras, e inició una cuarentena sanitaria obligatoria que incluyó un
protocolo para todo aquel ciudadano y/o ciudadana que solicitaba el ingreso al
país. Con estas medidas inmediatas, Paraguay
logró aplanar la curva, manteniéndose hasta hoy entre los países con menor
cantidad de casos positivos y de fallecimientos por coronavirus de la región. Paraguay fortaleció su sistema de salud
dotando de centros sanitarios al país, con insumos y equipamientos. Se
construyeron dos hospitales de contingencia; en Asunción e Itauguá, y se
contrataron a más de 2.389 profesionales de blanco. El Gobierno Nacional garantizó la
provisión y abastecimiento de bienes y productos en comercios y supermercados,
dando a la población la libertad de proveerse de insumos y alimentos bajo
estrictos controles sanitarios. Con las medidas económicas, sociales y
sanitarias, adoptadas en tiempo y forma, el país se preparó para hacer frente a
la pandemia. La Nación se unió y confió en las medidas
adoptadas, aplanando la curva. Este Gobierno asumió el compromiso de enfrentar
esta guerra, resistiendo como Nación, cuidando a toda su población defendiendo
la vida, la salud y la economía del Paraguay. Nuestro país fue uno de los pocos países
reconocidos internacionalmente por el buen manejo de las situaciones derivadas
de la pandemia. Organismos, autoridades y la prensa
internacional se hicieron eco de ello. Desde el inicio, el Ministro de Salud
Pública y Bienestar Social (MSPyBS), Dr. Julio Mazzoleni, tuvo a su cargo la
coordinación operativa de todo el sistema de salud pública, con facultad de
toma de decisiones y ejecución de acciones. El Presidente de la República fue uno de
los pocos mandatarios escogidos para entregar un mensaje específico al pleno de
la 73ª Asamblea Mundial de la Salud (AMS). Fronteras e ingreso Tras el cierre de fronteras, se fortaleció
la vigilancia de la salud en puestos limítrofes, aplicando la notificación
obligatoria de casos sospechosos y el autorreporte de viajeros. Se articuló con
las Fuerzas Militares la disposición de zonas para aislamiento y albergues.
Además, se lanzó una web app para el personal de blanco y personas en
cuarentena con geolocalización, control y monitoreo de pacientes,
notificaciones y actualización de protocolos. Recursos Humanos La capacitación a profesionales médicos y
de enfermería no intensivistas fue una prioridad, a fin de dar a conocer el
manejo de pacientes con COVID-19 en área de terapia intensiva. Se incorporaron
además 2.389 personales de blanco a 72 servicios de salud del país. Testeo y Laboratorio La disposición del Gobierno fue realizar
la mayor cantidad de testeos posibles. Paraguay pasó de tener una capacidad de
toma y análisis diario de 30 muestras, a más de 1.400. Se logró tener un
aumento progresivo con la incorporación del Laboratorio de Bioseguridad de
SENACSA, el Laboratorio de Biología Molecular, y otros cinco laboratorios
privados previamente certificados. Se habilitaron, también, puestos de toma
de muestras en la Costanera de Asunción, en la ciudad de San Lorenzo y en el
Hospital de Clínicas, dentro del departamento Central. Al mismo tiempo, se
instalaron capacidades en las regiones sanitarias del país para el mismo fin.
El MSPyBS recibió donaciones de kits de diagnóstico gestionadas tanto por la
Autoridad Reguladora Radiológica y Nuclear (ARRN) como por el CONACYT. Atención y Hospitales El Gobierno Nacional readecuó
instalaciones de salud en distintos establecimientos sanitarios, como el
INERAM, el Hospital Distrital de Alberdi, Hospital Nacional de Itauguá,
Instituto de Medicina Tropical, entre otros. Con esta acción, se amplió la
capacidad de internación para COVID-19 a 1.200 camas de internación. Se
construyeron en tiempo récord 2 hospitales de contingencia con 100 y 102 camas
para pacientes respectivamente y 36 para personal de blanco. En dos meses
sumamos 73 Unidades de Terapia Intensiva a las 304 que tenía Salud y estamos
avanzando con 60 más. En este sentido, también se habilitó de inmediato el
Centro de llamadas para notificación e información de COVID-19, primeramente
sólo dentro del 911 y luego desde el 154, habiendo recibido más de 20.000
llamadas. El equipo técnico de Gobierno desarrolló y difundió instructivos,
guías y protocolos para distintos sectores, acorde a normas adoptadas a nivel
nacional para la prevención y detección de COVID-19. Salud mental Conociendo el impacto positivo que la
actividad física tiene en el bienestar psicológico de las personas, el Gobierno
promovió durante la cuarentena inteligente, la realización de prácticas
deportivas virtuales por parte de las escuelas de la Secretaría Nacional de
Deportes. Se realizaron 3 clases diarias abarcando 19 modalidades, con el apoyo
de 28 profesores. Adquisiciones Se gestionó la adquisición de
medicamentos, insumos y equipamientos biomédicos, y se recibieron las donaciones
realizadas por parte del sector privado y la ciudadanía. Retorno y albergue de los connacionales El Paraguay cerró sus fronteras el 16 de
marzo para extranjeros y el 23 de marzo para paraguayos. En medio de ambas
fechas, el 18 de marzo, se creó́ el Centro de Coordinación Interinstitucional
(CCI), con la misión de apoyar al MSPyBS en la implementación de acciones para
prevenir la expansión del coronavirus en el Paraguay. Una de las principales tareas del Centro
es el control del ingreso de los connacionales al país, de forma planificada,
organizada y ordenada, asegurando la realización de una cuarentena obligatoria
en sitios dispuestos por el Gobierno Nacional.
En la última semana de marzo el CCI
contaba con un solo albergue. A la fecha, hay cerca de 70 instalados, a los que
se suman aproximadamente 38 “hoteles-salud” y “posadas-salud”. Al ocuparse el
CCI de esta logística, que incluye el ingreso, traslado, alimentación, control
sanitario, aplicación del test COVID-19, y muchos otros elementos, se logró́
que más de 8.000 connacionales retornen al país en el marco de una estrategia
que se mostró́ adecuada en la protección de la salud de la ciudadanía al evitar
el ingreso y propagación del virus en la población.