El Ministro Julio Mazzoleni indicó que se han dado todos los pasos necesarios para realizar gestiones y compras de la vacuna contra el COVID-19, por fuera del mecanismo COVAX, mediante las modificaciones en las leyes vigentes. Igualmente recalca que las negociaciones directas conllevan un gasto más alto.
El Paraguay más allá de las conversaciones
fuera del mecanismo COVAX, desde mediados del año 2020 tropezaba con varios obstáculos
para compras particulares de alguna de las vacunas contra el COVID-19. Por ley,
el Paraguay debía comprar exclusivamente por vía del fondo rotatorio de OPS, lo
cual se modificó el año pasado. Posteriormente, en el proceso de negociaciones,
todas las empresas consultadas establecieron criterios particulares que hacía necesarias
una nueva ley para que el Estado pudiera allanarse a los requerimientos de
estas compañías. Esto se ha logrado con la promulgación de la ley el día de
ayer. Por fuera de ello, el MSPBS vía resolución
también permite la importación y autorización para uso de emergencia (que no es
lo mismo que un registro sanitario en el país), de vacunas que haya sido
autorizada por un mecanismo de regulación. “Toda esa secuencia se tuvo que dar para
que el Paraguay pueda comprar estas vacunas de manera directa”, afirmó el Ministro
de Salud. El Paraguay destinó USD 47.000.000, de los
cuales se han adelantado USD 7.000.000 y restan USD 40.000.000. Por otro lado, el Ministerio de Defensa
tiene otros fondos de contingencia para emergencias y catástrofes de unos 90
millones de dólares que serían los orientados para la compra de vacunas por
fuera del COVAX. “El Paraguay ha sido uno de los primeros
países que han suscrito el acuerdo COVAX y en adelantar el dinero para eso. Lamentamos
el retraso, porque el mecanismo COVAX permite un acceso oportuno y equitativo para países pobres
y en vías de desarrollo. Las compras por fuera del mecanismo COVAX son más
caras y atentan contra el suministro de las vacunas para el mecanismo”, subrayó
el Ministro Julio Mazzoleni.