En el día Mundial de la Obesidad, es fundamental recordar que esta enfermedad provoca daños al organismo y se constituye como un factor de riesgo para enfermedades crónicas no transmisibles que pueden aparecer incluso a edades tempranas de la vida, dando lugar así a otras afecciones.
Entre las más conocidas se pueden citar la hipertensión, la diabetes, enfermedades respiratorias y varios tipos de cáncer. La obesidad infantil, por su parte se asocia con una mayor probabilidad de muerte prematura y discapacidad en la edad adulta. La obesidad ha alcanzado cifras elevadas en las últimas décadas, tanto a nivel mundial como a nivel regional. En Paraguay, 2 de cada 3 adultos presentan algún grado de sobrepeso u obesidad, y 1 de cada 3 niños en edad escolar registra esta condición. Los factores que llevan a que una persona desarrolle sobrepeso/obesidad son múltiples, y nuestra población está expuesta a ellos desde la niñez. La inactividad física y el bajo consumo de frutas y verduras representan amenazas para la salud de nuestros niños y jóvenes e influirá definitivamente en el futuro desarrollo de nuestro país. Asimismo en el contexto actual de pandemia de COVID-19 se considera de vital importancia la promoción de prácticas saludables para llevar una vida plena y feliz, tales como: Aumentar el consumo de frutas y verduras (5 porciones al día), así como de legumbres, cereales integrales y frutos secos. Limitar la ingesta energética procedente de grasas y azúcares. Realizar actividad física con regularidad, unos 60 minutos al día.