El documento es dirigido a profesionales y servicios de salud, herramientas organizacionales y normativas para realizar la atención de pacientes en su integralidad.
Este martes 30 de noviembre, se realizó el lanzamiento del documento denominado “Modelo de Atención Integral al Niño, Niña y Adolescente con Espina Bífida y Mielomeningocele”, elaborado por la Dirección de Salud Integral de Niñez y Adolescencia (DIRSINA) dependiente de la Dirección General de Programas de Salud (DGPS) y que cuenta con Resolución Ministerial S.G N° 541/2021. Este material está abocado a brindar a los profesionales y Servicios de Salud, herramientas organizacionales y normativas para llevar a cabo la atención de estos pacientes en su integralidad. Además, se desarrolló la jornada alusiva al Día Mundial de la Espina Bífida, con ponencias a cargo de destacados especialistas quienes se desempeñan en las diferentes áreas que atiende a esta patología. Día Internacional de la Espina Bífida Cada 21 de noviembre se celebra el Día Internacional de la Espina Bífida, que tiene como objetivo, concienciar a la población sobre las vías por las cuales los defectos del tubo neural pueden reducirse, a través de la prevención primaria, el cual abarca el periodo preconcepcional y prenatal precoz. Es también una oportunidad para tomar conciencia y comprender más acerca del tema y un medio para defender y promover los derechos de las personas con estas discapacidades, así como mejorar su calidad de vida. La Espina Bífida (EB) y, más concretamente, el mielomeningocele, es la malformación congénita del tubo neural más grave compatible con la vida y la segunda causa de discapacidad física en la infancia, después de la parálisis cerebral. Se trata de una malformación congénita por la cual la columna vertebral no se desarrolla normalmente en las primeras semanas del embarazo, eso provoca daños permanentes en la médula espinal y el sistema nervioso del bebé y puede dar lugar a parálisis de los miembros inferiores y a problemas funcionales del intestino y la vejiga Estas malformaciones podrían evitarse mediante el aporte farmacológico de ácido fólico antes de producirse el embarazo (de 3 a 6 meses antes) y durante los tres primeros meses del mismo, ya que es el momento en que se forma el tubo neural. Este suplemento está indicado para todas las mujeres que deseen quedar embarazadas, y en aquellas familias en las que existen antecedentes de esta malformación, la dosis de ácido fólico requerida es superior. Los pacientes con espina bífida, requieren una atención multidisciplinaria e integral, en el que forman parte los especialistas pediatras, neurólogos, neurocirujanos, ortopedistas, nefrólogos, urólogos, fisiatras, fisioterapeutas, psicólogos infantiles, genetista. El evento contó con la presencia de las autoridades ministeriales Dra. Karen Diaz, asesora médica del Viceministerio de Rectoría y Vigilancia de la Salud, la Dra. Leticia Pintos, Directora General de Servicios y Redes de Salud; la Dra. Patricia Veiluva, directora de la DGPS; la Dra. Zully Suárez, directora de DIRSINA; la Dra. Marta Ascurra, directora del Programa Nacional de Prevención de Defectos Congénitos y la representante de la OPS Dra. Haydée Padilla. Además, estuvieron presentes profesionales de la salud y representantes de la asociación de padres de los pacientes.