Es un hecho que muchas personas festejan emocionadas la despedida del año, sin embargo, el inicio del nuevo año también suele ser un motivo especial para que las personas consuman alcohol, por lo cual, el Ministerio de Salud, recomienda evitar por completo su consumo, especialmente a las personas que padezcan alguna enfermedad crónica.
El alcohol actúa como un depresor
de muchas acciones del Sistema Nervioso Central (SNC) y sus efectos sobre este
son dosis-dependientes. En pequeñas cantidades, el alcohol promueve la
desinhibición, pero con el aumento de esta concentración, el individuo pasa a
presentar una disminución de la respuesta a los estímulos, habla pastosa,
dificultad para deambular, entre otros. La ingestión de bebidas alcohólicas
altera la percepción, los tiempos de reflejo, la capacidad de reacción y la
toma de decisiones, por lo que se recomienda no conducir vehículos para evitar
sinestros viales y desenlaces fatales Hay que tener en cuenta, que no hay forma de acelerar el
proceso de metabolización del alcohol. El cuerpo lo elimina de tres maneras
posibles: evaporación, excreción y a través del metabolismo, y para ello sigue
su curso y ritmo normal. El hígado tan sólo es capaz de metabolizar 0,12 g/l de
alcohol en sangre cada hora, con lo cual el proceso de eliminación (dependiendo
del alcohol consumido) podría llegar a finalizarse incluso 19 horas después. Recomendaciones: Para no llegar a la embriaguez, beba agua entre bebidas
alcohólicas, esto no solo lo ayudará a mantenerlo hidratado, sino que también
lo ayudará a ralentizar su consumo y lo mantendrá cómodo en un entorno social.
Además, podrá amanecer fresco y sin ningún tipo de secuela (resaca) relacionada
con el consumo de alcohol. Es fundamental poner atención a las bebidas mezcladas con
frutas y/o saborizantes debido a que, como son muy dulces, no se perciben los
efectos de las mismas en un primer momento, por lo que su consumo se realiza en
mayor cantidad. Los menores de edad no pueden
consumir clericó, ya que por lo general contiene alcohol, tampoco deben ingerir
sidra en el momento del brindis ni otras bebidas con alcohol. Se recuerda la vigencia
de las legislaciones como el Código de la niñez y la adolescencia sobre la
prohibición del consumo de alcohol en menores. Los conductores de vehículos no
deben consumir alcohol, ya que al cuerpo le lleva 72 horas eliminar el alcohol
que ha ingresado al organismo, independientemente a los fármacos que se consuma
para contrarrestar los síntomas de la resaca. Por más de que la persona no se
sienta borracha, el tiempo de respuesta se retrasa, por lo cual ya está
incapacitada para manejar. Los pacientes sometidos a tratamiento
con medicamentos deben tener en cuenta las posibilidades de interacciones que
hay con las bebidas alcohólicas, especialmente si se trata de una medicación
psiquiátrica. Hay un efecto que se denomina potenciación, esto es, cuando la
persona toma su medicamento, toma alcohol, y se potencia el efecto.
Los que sufren enfermedades cardiovasculares, es otro grupo
que también debe tomar mayores precauciones con el consumo de alcohol, puesto
que es tóxico para el músculo cardiaco y produce la miocardiopatía.