El vínculo con el establecimiento de salud donde nació el bebé continúa luego de su egreso, a través visitas al consultorio. Las mismas permiten confirmar que el recién nacido permanece saludable y que la lactancia fue establecida de manera adecuada.
Algunas condiciones propias de los primeros días de vida deben ser monitoreadas para asegurar el bienestar del bebé: la coloración amarillenta de la piel, el progreso de peso, la evolución del estado del cordón umbilical.
Si algún aspecto requiere tratamiento, el control ambulatorio permite iniciarlo oportunamente, de modo de evitar consecuencias en el bebé. Y, fundamentalmente, en este espacio es posible despejar todas las dudas que puedan surgir los primeros días en el hogar. Por ello es prioritario concurrir a la cita convenida con el equipo de salud.
Cabe señalar que el primer control se efectúa a los 3 días del alta; después, a los 15 días de vida y, luego, al mes del nacimiento.
Campaña “28 días, tiempo para cuidar y amar”
Se trata de una iniciativa de la OPS apoyada por el MSPyBS, cuyos objetivos son incrementar el conocimiento, las habilidades y la autoconfianza de las madres, familias y los cuidadores de recién nacidos, y concienciar a profesionales de la salud sobre la importancia de las buenas prácticas de cuidado de los recién nacidos y fomentar la toma de decisiones asertivas para reducir la mortalidad neonatal.
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