Los niños con sobrepeso u obesidad tienen mayores probabilidades de seguir siendo obesos en la edad adulta y de padecer enfermedades a edades tempranas, como la diabetes y afecciones cardiovasculares.Alimentación saludable y la práctica de actividad física diaria son esenciales para que niños y adolescentes con obesidad logren un peso saludable.
La obesidad infantil es uno de los problemas de salud pública más graves del siglo XXI, afectando progresivamente a muchos países de bajos y medianos ingresos, sobre todo en el medio urbano. La prevalencia ha aumentado a un ritmo alarmante. En Paraguay, datos aportados por el Sistema de Vigilancia Alimentario Nutricional (SISVAN-INAN.MSPBS) revelan que un 21,6% de niños y adolescentes de 5 a 19 años tienen sobrepeso y 13% tienen obesidad. Los niños con sobrepeso u obesidad tienen mayores probabilidades de seguir siendo obesos en la edad adulta y de padecer a edades más tempranas enfermedades no transmisibles como la diabetes y las enfermedades cardiovasculares. La obesidad en la infancia y la adolescencia tienen consecuencias para la salud tanto a corto como a largo plazo. Las consecuencias más importantes del sobrepeso y la obesidad infantil, que a menudo no se manifiestan hasta la edad adulta, son: • Enfermedades cardiovasculares (principalmente las cardiopatías y los accidentes vasculares cerebrales). • Diabetes. • Trastornos del aparato locomotor, en particular la artrosis. • Ciertos tipos de cáncer (de endometrio, mama y colon). Contar con obesidad en la niñez se asocia a una mayor probabilidad de muerte y discapacidad prematura en la edad adulta. El sobrepeso, la obesidad y las enfermedades asociadas son en gran medida prevenibles. Por consiguiente, hay que dar una gran prioridad a la prevención de la obesidad infantil. No se recomienda poner a dieta a los niños con sobrepeso y obesidad, sino más bien se plantea la aplicación de un plan de alimentación saludable donde se incluya a todo el núcleo familiar. Además de la alimentación saludable, la práctica de actividad física diaria es esencial para que los niños y adolescentes con obesidad logren un peso saludable. Recomendaciones generales • Aumentar el consumo de frutas y hortalizas, preferir alimentos naturales (huevos, legumbres, cereales integrales, carnes magras), antes que los alimentos envasados (snacks, bebidas azucaradas, embutidos y otros). • Reducir la ingesta de azúcares (jugos envasados, gaseosas, galletitas). • Realizar actividad física: 60 minutos diarios como mínimo de actividad física de intensidad moderada o vigorosa (saltar, correr, bailar, trepar, hacer deportes, en la casa, en la escuela, en la plaza, etc.).