¿Cuándo se indica alcohol para la higiene de manos?

Si no se dispone de agua y jabón, se puede aplicar alcohol en gel, ya que constituye una alternativa de desinfección de manos.
En el ámbito sanitario, debe usarse el alcohol para higienizar las manos, antes y después del contacto directo con pacientes, al manipular dispositivos invasivos, luego de entrar en contacto con líquidos corporales, después de quitarse los guantes.
La condición ideal de su uso es tener las manos limpias, es decir, previamente higienizadas con agua y jabón.


El papel de las manos en la transmisión de las Infecciones Asociadas a la Atención en Salud (IAAS) se ha demostrado ampliamente, por lo que el lavado de manos es una medida simple y efectiva para interrumpir la transmisión de microorganismos patógenos en los establecimientos de salud. Sin embargo, la adherencia por parte del personal de salud es baja, según indica el Dr. Adrián Coronel, titular del Programa Nacional de Control de Infecciones de la Dirección de Vigilancia de Enfermedades Transmisibles del MSPyBS.

La transmisión de gérmenes durante la atención clínica diaria de los pacientes a través de las manos se identificó desde el año 1847, por Ignaz Semmelweis, cuando estableció el beneficio obtenido por el lavado de las manos y la reducción de la mortalidad materna.

Un buen lavado de manos previene el 50% de enfermedades infectocontagiosas y evita igualmente las transferencias microbianas. Si no se dispone de agua y jabón en el momento, se puede emplear el alcohol en gel, ya que constituye una alternativa de desinfección.

La condición ideal para el uso de la solución alcohólica es tener las manos limpias, es decir, éstas deben estar previamente higienizadas con agua y jabón, para luego emplearse como una alternativa, puesto que la solución alcohólica funge como un fijador.

Después de cada cinco aplicaciones del alcohol, es necesario lavar las manos con agua y jabón, de manera a eliminar el residuo que deja el producto luego de varios usos.

Cabe resaltar que los alcoholes tienen excelente actividad germicida contra bacterias, patógenos multirresistentes, Mycobacterium tuberculosis y algunos hongos. Ciertos virus (lipofilicos) envueltos (virus del herpes simple, virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), virus de la gripe, virus sincicial respiratorio, los virus de la hepatitis B y de la hepatitis C son susceptibles a concentraciones entre 60 y 80%. Recordar que no tienen acción contra esporas ni protozoarios.

La actividad antimicrobiana de los alcoholes se debe a su capacidad de desnaturalizar las proteínas de los microorganismos. Las soluciones que contienen entre 65 % y 80 % de alcohol fueron aprobadas desde el año 1994, como antisépticos en la higiene de manos.

Utilizar alcohol en gel ofrece condiciones que, probablemente, mejoren la adherencia del personal a la higiene de manos, pero no reemplaza al lavado con agua y jabón.

En el ámbito sanitario ¿Cuándo usar alcohol para el lavado antiséptico de manos?

•           Antes y después del contacto directo con pacientes.

•           Después de quitarse los guantes.

•           Antes de manipular un dispositivo invasivo (se usen guantes o no) como parte de la asistencia al paciente.

•           Después de entrar en contacto con líquidos o excreciones corporales, mucosas, piel no intacta o vendajes de heridas.

•           Al atender al paciente, cuando se pase de un área del cuerpo contaminada a otra limpia.

•           Después de entrar en contacto con objetos inanimados (incluso equipo médico) en la inmediata vecindad del paciente.

•           Lavarse las manos con agua y un jabón simple o antimicrobiano, o frotárselas con una preparación alcohólica antes de manipular medicamentos o preparar alimentos.

•           No utilizar jabones antimicrobianos cuando ya se haya utilizado una preparación alcohólica para la fricción de las manos.