Instan a extremar cuidados para protegerse de la bronquiolitis

Si su hijo/a manifiesta síntomas respiratorios, evite enviarlo a la escuela o la guardería, para prevenir la expansión de la infección, y llévelo de inmediato al establecimiento de salud más cercano.
Así también, es fundamental tomar los recaudos necesarios para no contagiarse: uso de tapaboca, lavado de manos y etiqueta de la tos.


""

La bronquiolitis es una enfermedad respiratoria común en los bebés, que genera inflamación de las vías respiratorias pequeñas en los pulmones. Afecta a niños menores de 2 años de edad.

El causante de esta enfermedad es, por lo general, el virus sincitial respiratorio (VSR), que se encuentra circulante en el país, identificado en más del 90% de los casos.

Cómo se transmite

La causa etiológica más frecuente de esta patología es el virus sincitial respiratorio; este virus, se transmite mediante secreciones (moco o saliva) de la persona infectada.

El grupo con mayor riesgo de enfermar gravemente por el virus sincitial y requerir internación es:

Los prematuros, los niños menores de 2 años, sobre todo los menores 6 de meses, con enfermedad de base, como enfermedad cardíaca congénita, desnutrición; niños con sistema inmunitario debilitado, niños con trastornos neuromusculares, incluidos aquellos que tienen dificultad para tragar.

Síntomas

El cuadro de bronquiolitis se presenta como un resfriado, inicialmente. El niño puede manifestar fiebre, tos, secreción nasal, sibilancias (chillido de pecho), apetito reducido e incluso, dificultad para respirar.

Complicaciones

Si el cuadro no es tratado oportunamente, el niño puede presentar dificultad respiratoria grave, con requerimiento de internación o asistencia en terapia intensiva, sobreinfección bacteriana y, en algunos casos, presentan hiperreactividad bronquial posterior al cuadro infeccioso.

Cómo prevenir la bronquiolitis

Mantener la lactancia materna exclusiva en menores de 6 meses, puesto que tiene efecto protector contra enfermedades.

Lavarse las manos con agua y jabón antes de tocar al bebé.

Evitar que personas con fiebre o que presentan algún signo o síntoma de resfriado o tos estén en contacto cercano con su niño/a.

Evitar enviar a su bebé a la guardería, si se encuentra con un cuadro respiratorio o algún otro signo de enfermedad.

El uso de mascarilla del cuidador es esencial para impedir contagio por secreciones.

No compartir cubiertos ni vaso.

Higienizar con frecuencia juguetes, chupetes y superficies que entren en contacto con el bebé y sus alimentos.

Para tener en cuenta:

La consulta oportuna es clave para evitar complicaciones.

Se insta a los padres y cuidadores que están con síntomas respiratorios que tomen los recaudos para evitar el contagio a los niños: uso de mascarilla, lavado de manos y etiqueta de la tos.

Recuerde: no debe colocar mascarilla a niños menores de 2 años.