Se debe inspeccionar dentro y fuera de la casa y en todos los entornos, durante todo el año, pues esta práctica constituye la principal medida para mitigar las enfermedades transmitidas por el Aedes aegypti, tales como dengue, Zika y chikungunya.
Invertir 10 minutos diarios en la búsqueda y eliminación de potenciales criaderos de mosquitos hace la diferencia, es una manera efectiva de protección de enfermedades arbovirales transmitidas por el Aedes aegypti. Este mosquito se reproduce en agua estancada, por lo que es necesario eliminar todos los recipientes que contienen o puedan contener agua que no se va a utilizar. Aquellos objetos inservibles que no puedan desecharse como aparatos domésticos, neumáticos u otros, se recomienda colocarlos bajo techo o cubrirlos, de forma a evitar que puedan acumular agua. Tambores o recipientes con agua que serán utilizados, deben mantenerse herméticamente tapados. Asimismo, se indica cambiar a diario el agua de los floreros para evitar que se conviertan en criaderos, previa higiene con cepillo, agua y jabón, además de realizar limpieza de las raíces y el tallo. Es igualmente importante desechar el agua acumulada en platos de macetas/planteras. Dengue El Dengue es una enfermedad producida por un virus que se transmite de una persona a otra a través de la picadura Aedes aegypti. Este mosquito se encuentra preferentemente en ambientes urbanos, y la hembra es la que se alimenta de sangre humana para madurar sus huevos, los cuales deposita en las paredes de recipientes con agua estancada, conocidos como “criaderos”. Estos huevos se rompen en contacto con el agua, dando lugar a las larvas, que se transforman en pupas, para finalmente convertirse en mosquito adulto. Este proceso se desarrolla durante siete días, aproximadamente. El mosquito adulto vive en promedio treinta días.