Con el lema “cuidame antes, durante y después”, desde hoy, 14 de noviembre hasta el 20, se conmemora la semana del prematuro, para visibilizar la importancia de la atención integral e integrada del binomio madre-hijo, así como del entorno familiar y comunitario.
Para llevar un embarazo sin complicaciones y a buen término, es importante realizar los controles prenatales, puesto que, el parto antes de las 37 semanas de gestación, conocido como parto prematuro, se asocia a enfermedades prevenibles que se presentan durante el embarazo, y que pueden ser tratadas y controladas si son detectadas de forma oportuna. En el mundo, uno de cada diez niños nace antes de las 37 semanas de gestación (prematuros) y solo siete de cada diez niños nacidos prematuros superan los primeros 30 días de vida. Un recién nacido prematuro tiene alto riesgo de presentar alguna secuela que afecte su desarrollo, como ser infecciones respiratorias frecuentes, o cierto grado de discapacidad motora, cognitiva, auditiva o visual. No obstante, muchos bebés logran superarlos, acompañados del amor de sus familiares, y de la atención cariñosa y con calidad de los profesionales de salud. El día mundial del prematuro se recuerda el 17 de noviembre y, este año, la semana del prematuro, instaurada por Decreto Presidencial N° 6311/16 en la tercera semana de noviembre, se conmemora del 14 al 20 de noviembre. En este contexto, este año fue seleccionado el derecho N° 5 del Decálogo del Prematuro: “los bebés nacidos de parto prematuro tienen derecho a ser alimentados con leche materna”, el cual a su vez es promocionado con el siguiente lema: “la leche de mamá, amor que nutre y protege”. En las semanas previas, se realizaron talleres y seminarios con profesionales del área, además de otras actividades de concienciación en los distintos establecimientos de salud. Para el día central, se tiene previsto un acto, con la participación de autoridades sanitarias y de organizaciones internacionales que brindan su apoyo técnico y financiero a la salud de la niñez.