Las lluvias aumentan el riesgo de proliferación del vector de estas enfermedades arbovirales. Por ello, es imprescindible verificar el patio y el interior de las casas para identificar posibles criaderos e inactivarlos.
Con la simple inspección de las viviendas, dentro y fuera de ellas, especialmente después de cada lluvia, se contribuye a la disminución de mosquitos Aedes aegypti, y, por ende, a la disminución de casos de chikungunya y dengue. Invertir 10 minutos diarios, todo el año, en emplear esta acción aporta de manera significativa a la salud de la población. Es necesario desechar todo objeto inservible que pueda acumular agua, de todos los entornos, ya sea dentro o fuera de un espacio físico, para el efecto, se puede tener en cuenta las siguientes medidas: • Verificar que no existan objetos que puedan acumular agua, esparcidos al aire libre. • Eliminar lo que no se va a utilizar: latas, botellas, tapitas, etc. • Inspeccionar y limpiar las canaletas. • Guardar bajo techo o tapar los recipientes con agua para uso o consumo. • Colocar boca abajo las botellas que se seguirán utilizando. • Observar que no haya agua acumulada en los platos de las macetas. • Reemplazar el agua del florero por arena húmeda. • Controlar que no se acumule agua entre el tronco y la rama de los árboles. • Eliminar o guardar bajo techo los neumáticos. • Limpiar el recipiente del bebedero de las mascotas, cada vez que se cambie el agua. Asimismo, se exhorta a la población a utilizar barreras de protección personal, repelente, mosquiteros al dormir y tela metálica en puertas y ventanas, así como la vestimenta con prendas de colores claros que cubran gran parte del cuerpo.