Agua: la bebida ideal para hidratarse

La cartera sanitaria recomienda el consumo de, al menos, dos litros de agua para mantener el cuerpo correctamente hidratado, y evitar, en lo posible, el consumo de bebidas azucaradas y alcohólicas.

Es importante ingerir agua todos los días, sin esperar a que el cuerpo tenga sed, ya que, generalmente, la sed es la señal del organismo para reponer la pérdida de agua.

Este líquido vital es un nutriente esencial para la vida y para el cuerpo humano. Participa en casi todos los procesos fisiológicos, por lo que es una bebida indispensable.

La recomendación general es beber al menos ocho vasos de agua por día, para mantener el cuerpo bien hidratado y así lograr un buen funcionamiento metabólico.

El agua contribuye a funciones indispensables para el organismo:

- Transporta sustancias nutritivas.

- Elimina las sustancias tóxicas a través de las heces, el sudor y la orina.

- Regula la temperatura del cuerpo a través de la transpiración.

- Alivia y previene el estreñimiento.

¿Qué ocurre cuando el cuerpo se deshidrata?

Cuando la ingesta de agua es menor a la recomendada, en el organismo puede producirse una deshidratación. Dependiendo del grado de la misma, pueden aparecer síntomas, como mareos, dolores de cabeza, cansancio y disminución de las habilidades físicas y mentales. Una hidratación insuficiente puede producir también problemas renales e intestinales, como el estreñimiento. La piel también puede afectarse, produciéndose resecamiento y pérdida de elasticidad.

La cartera sanitaria insta a la población en general a no olvidarse, en estos días santos, de ingerir la cantidad necesaria de agua, reducir el consumo de sal, de grasas, azúcares y de alcohol. 

Igualmente, a aquellos pacientes que se encuentran bajo medicación, se les recuerda la importancia de seguir estrictamente las indicaciones de su médico tratante.