La diabetes es uno de los diagnósticos más frecuentes que está asociada al consumo desproporcionado de azúcar, sin embargo, también aumenta el riesgo de enfermedades cardiacas, presión arterial alta, inflamación crónica, enfermedad hepática no alcohólica y causar obesidad.
Las golosinas, las bebidas gaseosas azucaradas, la miel de caña, los dulces y las mermeladas en los helados, tortas, masitas, jugos en sobre, entre otros, son productos procesados industrialmente y que contienen una gran cantidad de azúcar. Desde la Dirección de Vigilancia de Enfermedades No Transmisibles recuerdan la importancia de acostumbrarse a minimizar el tenor dulce de los alimentos. De esta manera, se podrá distinguir y disfrutar de los demás sabores de la alimentación diaria, con base en el consumo de alimentos saludables. ¿Qué se puede hacer para reducir el consumo de azúcares? Se recomienda disminuir el consumo de azúcar de forma gradual, no hacerlo de golpe, ya que esto puede ocasionar desbalances de la glucosa en sangre. Por ejemplo: evitar añadir azúcar al café o a los postres y, así, adaptar el paladar a los sabores reales de los alimentos. - Consumir la fruta entera. En caso de preparar ensalada de frutas, evitar el agregado de azúcar o edulcorante. - Tomar café, té y otras infusiones, sin azúcar. En caso de utilizar edulcorante, hacerlo siguiendo la dosis diaria recomendada. - Preferir los jugos naturales, sin agregado de azúcares. - Reemplazar los alimentos con alto contenido de azúcares por alimentos naturales, como las frutas de estación, ya que aportan vitaminas, minerales y fibra, lo cual ayuda a cuidar la salud. - Preferir los jugos naturales, sin agregado de azúcares. - Evitar las bebidas azucaradas (gaseosas, bebidas energéticas o isotónicas). - Entre los edulcorantes, preferir aquellos que se encuentren debidamente registrados por el INAN, como la Stevia. - Practicar la lectura del etiquetado de los alimentos envasados y elegir los productos con la menor cantidad de azúcares añadidos y que se pueden identificar en la lista de ingredientes. - Añadir fruta fresca a los cereales, como el caso de la avena, acompañar con bananas, frutillas, o fruta seca, como las pasas de uva, almendras o nueces. - Sustituir el azúcar por compota de manzana sin edulcorar. - En caso de utilizar edulcorante, hacerlo siguiendo la dosis diaria recomendada (hasta tres gotas o un gramo del sobrecito de edulcorante).