La labor de profesionales médicos del Centro Nacional de Quemaduras y Cirugías Reconstructivas (CENQUER), mediante la técnica de uso de membrana amniótica, permite una mejor calidad de vida a pacientes víctimas de quemaduras.
El paciente con quemaduras demanda de un manejo complejo, y el uso de membrana amniótica como apósito biológico es un método muy valioso para favorecer su evolución. Evita la pérdida de líquidos, electrolitos y proteínas en las áreas cruentas, a modo de barrera artificial; también ayuda a prevenir las infecciones, sin desmerecer la importancia del efecto analgésico sobre las lesiones. El director general del Centro Nacional de Quemaduras y Cirugías Reconstructivas (CENQUER), Dr. Saúl Zaputovich, explicó un caso puntual en el que el uso de esta técnica, combinada con la técnica de microinjertos MEEK, permitió a un niño que estuvo internado en terapia intensiva recuperar su calidad de vida. El caso data del año 2020, cuando el pequeño itapuense de 2 años de edad en ese entonces, sufrió quemaduras graves en el 50 % del cuerpo, en un accidente con agua caliente. Su mamá, Gloria, destaca la atención oportuna y con calidad para su hijo. “Agradecer realmente lo que hicieron aquí porque, él llegó prácticamente sin vida. Yo aprendí acá que las primeras horas, son cruciales para que un quemado pueda recibir tratamiento, pero aquí hicieron de todo. Los primeros días fueron durísimos, pero luego de tres meses de tratamiento en terapia intensiva nos dieron el alta y pasó a sala”. Pero la contención y el trabajo de recuperación no quedó allí, el acompañamiento multidisciplinario permitió una restitución óptima a lo largo del tiempo, no solo en lo físico, sino también en lo psicológico. “Yo nunca tuve antes de esto la oportunidad de estar en un sitio como este, siempre escuchaba malos comentarios, pero la verdad que no es así. La atención super, los doctores tienen la calidad humana que te hace sentir bien, te orientan y van guiando; son unas personas excepcionales, realmente” recalcó Gloria, al tiempo de recordar que evitó la necesidad de salir del país para que su hijo obtenga este tratamiento. Justamente, el Dr. Saúl Zaputovich, recalcó este punto al recordar que: “La madre iba a llevarlo a España para hacerle el mismo tratamiento, cuando le dijimos que acá le podíamos dar el mismo tratamiento ella confió en nosotros y el resultado está ahí, ahora tiene seis años y está jugando”. El CENQUER es pionero en el país en el procesamiento de la membrana amniótica, y uno de los primeros a nivel sudamericano, solo por detrás de Colombia y Argentina. Esta técnica se utiliza no solamente en pacientes quemados para cobertura temporal o definitiva, dependiendo de la profundidad de la quemadura; sino también se utiliza en oftalmología, en úlceras de córneas y otras patologías. Para la atención de estas patologías, el banco de tejidos del CENQUER provee al sistema de salud público y privado, tejidos como hueso, tendones y tejido cardiaco. Solo la placenta obtenida de las cesáreas programadas es utilizada en esta técnica, a modo de que sea lo más estéril posible.