Hoy, la Dra. María Teresa Barán, presente en el 78vo. periodo de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas, en su intervención durante la reunión de alto nivel sobre prevención, preparación y respuesta frente a las pandemias, señaló que la última evidenció las desigualdades exacerbadas en el ámbito sanitario, económico y social, en la que se agudizaron las inequidades, tanto entre los países, como al interior de los mismos, y la tenue solidaridad internacional.
Este miércoles, 20 de septiembre, en su intervención durante la reunión de alto nivel sobre la prevención, preparación y respuesta frente a las pandemias, la titular de Salud Pública de nuestro país, Dra. María Teresa Barán, señaló que la última pandemia evidenció las desigualdades exacerbadas en el ámbito sanitario, económico y social, en la que se agudizaron las inequidades, tanto entre los países, como al interior de los mismos y la tenue solidaridad internacional.
En ese contexto, remarcó que las naciones se vieron obligadas a impulsar procesos globales en la búsqueda de herramientas que reduzcan las brechas y experiencias negativas, especialmente de los países en desarrollo y sin litoral marítimo.
“Una de las lecciones más importantes que dejó la pandemia es que necesitamos estar preparados y contar con mecanismos sólidos y eficientes para hacer frente a una situación de emergencia sanitaria, que apunten al fortalecimiento de las capacidades regionales y nacionales, y que potencien la capacidad de respuesta y resiliencia de los sistemas de salud de nuestros países”, añadió Barán.
Sin embargo, sostuvo que la creación de nuevas estructuras y la superposición de otras sobre temas comunes, además de generar confusión en la gobernanza global, puede implicar compromisos financieros innecesarios para los países, especialmente en un contexto de recuperación post pandemia, en el que los recursos son escasos y deben ser utilizados de forma estratégica.
Por ello, expresó que es fundamental buscar la optimización de los mecanismos existentes y asegurar que, en caso de existir futuros acuerdos globales o mecanismos de distribución de productos médicos, se garanticen las mejores condiciones para los países y que las mismas prevalezcan sobre cualquier interés.
“En ese sentido, valoramos el trabajo realizado en el seno del órgano de negociación intergubernamental, en el que se encuentran en discusión temas centrales para abordar las amenazas de salud global y promover la colaboración entre los Estados Miembros. Al mismo tiempo, es fundamental que el futuro instrumento respete la soberanía de los Estados Miembros y garantice la rectoría de las Autoridades Sanitarias de los países en temas de salud, en ese sentido la labor de la OMS es elemental para proporcionar orientación técnica y apoyo a los Estados Miembros, para fortalecer nuestros sistemas de salud”, finalizó la Ministra de nuestro país, en el septuagésimo octavo periodo de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas.
