La donación de órganos de una fallecida permitió el procedimiento que mejorará la calidad de vida de pacientes en lista de espera de riñones y córneas.
En un gesto de amor que puede salvar a otras vidas, la generosidad y el altruismo en su máxima expresión, los familiares de una mujer de 47 años permitieron la extracción de los dos riñones y las dos córneas de la donante fallecida, con fines de trasplante. El Instituto Nacional de Ablación y Trasplante (INAT), dependiente del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social (MSPyBS), informó sobre el éxito de la ablación de órganos y tejidos, en el hospital de Clínicas de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Asunción. Gracias a la donación, serán beneficiados con los riñones un paciente masculino, de 47 años, del hospital nacional de Itauguá, así como, otro receptor masculino de 44 años, del hospital central del Instituto de Previsión Social (IPS). Los trasplantes de órganos se realizarán en los mencionados establecimientos. Estos pacientes fueron seleccionados mediante los estudios de histocompatibilidad (HLA y CROSS – MATCH), la edad, y el tiempo que llevan en la diálisis. Por otra parte, las corneas fueron extraídas, por la Fundación Oca del Valle, para su posterior implante. El INAT agradece a los familiares de la donante, que, a pesar de perder a un ser querido, tomaron la decisión de brindar otra oportunidad a los pacientes que se encuentran en lista de espera. Igualmente, agradeció al personal del hospital de Clínicas por la predisposición para el operativo de donación y trasplante, y a todos los profesionales involucrados, desde el Laboratorio Central de Salud Pública y al Laboratorio Díaz Gill. La decisión de ayudar al otro después de la vida Ser donante es una elección personal. Significa que algún día, a través de ella, se pueda salvar vidas. Es muy importante que familiares y amigos sepan de la decisión, y que ellos la apoyen y respeten. Según la “Ley Anita” (N° 6.170/18), toda persona mayor de 18 años es considerada donante de órganos posterior a su fallecimiento. Si alguien no desea donar, debe manifestarlo por escrito al Instituto Nacional de Ablación y Trasplante (INAT). Para iniciar el trasplante de órganos y tejidos, es necesaria la donación de órganos, pues una vez que esto se dé, equipos multidisciplinarios de diferentes sectores se transforman en uno solo para verificar la compatibilidad, realizar la ablación (extracción del o los órganos) y, finalmente, llevar adelante el trasplante al receptor o los receptores.