Algunos de los síntomas que presenta el dengue son: fiebre alta, dolores más intensos, cefalea importante, dolor retro ocular, articulaciones, en los músculos y/o huesos. El rash (erupciones en la piel) en la mayor parte del cuerpo aparece entre el quinto y séptimo día. Entre los signos de alarma se puede mencionar: vómitos, dolor abdominal, sangrado de mucosas, somnolencia, debilidad extrema, ante esto, buscar atención médica urgente.
El dengue se distingue por fiebre súbita de hasta 40 °C, dolor detrás de los ojos y en las articulaciones, los músculos y/o los huesos, dolor de cabeza intenso y sarpullido en la mayor parte del cuerpo. El mosquito Aedes aegypti es el vector responsable de transmitir el dengue en nuestro país. Detallando mejor los síntomas de dengue, esta enfermedad se presenta con fiebre alta, dolores más intensos, cefalea importante, dolor retro ocular, articulaciones, en los músculos y/o huesos. El rash (erupciones en la piel) en la mayor parte del cuerpo aparece entre el quinto y séptimo día, al culminar el periodo de viremia. En cuanto a la fase de viremia del dengue o presencia del virus en la sangre es de cuatro a siete días, periodo en el que la persona afectada puede transmitir la enfermedad, a través del mosquito Aedes aegypti. Entre los signos de alarma se puede mencionar: vómitos, dolor abdominal, sangrado de mucosas, somnolencia, debilidad extrema, ante esto, buscar atención médica urgente. En esta fase crítica, los signos de alarma pueden aparecer y generar un rápido deterioro clínico de la persona, que puede darse dentro de 48 horas después de la disminución o desaparición de la fiebre (entre tres y siete días luego del inicio de la fiebre). Recomendaciones para evitar la proliferación del mosquito Para impedir la proliferación del mosquito se insta a continuar con la destrucción de criaderos en el entorno domiciliario, laboral y de los servicios de salud, y a utilizar barreras de protección para evitar picaduras de mosquitos: repelente y mosquitero para dormir. Qué tomar en cuenta a la hora de inactivar criaderos • Verificar que no existan objetos que puedan acumular agua esparcidos al aire libre. • Eliminar lo que no se va a utilizar: latas, botellas, tapitas, etc. • Inspeccionar y limpiar las canaletas. • Guardar bajo techo o tapar los recipientes con agua para uso o consumo. • Colocar boca abajo las botellas que se seguirán utilizando. • Observar que no haya agua acumulada en los platos de las macetas. • Reemplazar el agua del florero por arena húmeda. • Controlar que no se acumule agua entre el tronco y la rama de los árboles. • Eliminar o guardar bajo techo los neumáticos. • Limpiar el recipiente del bebedero de las mascotas, cada vez que se cambie el agua.