Un niño salvadoreño de 3 años que fue sometido a un trasplante de médula alogénico fue dado de alta hoy en el Hospital Pediátrico Niños de Acosta Ñu. Se trata del primer paciente que viene del extranjero para este complejo y delicado tratamiento. El pequeño Jeremy llegó con sus padres a Paraguay el pasado 5 de octubre, luego de que el Ministerio de Salud le abriera las puertas del citado servicio especializado para el trasplante de médula que necesitaba con urgencia. Previamente, el menor pidió ayuda a hospitales de Estados Unidos, Canadá, Francia y Alemania sin respuestas positivas.
Globos, aplausos y risas de médicos y enfermeras abrían paso a Jeremy mientras abandonaba caminando la sala de Internación del Acosta Ñu. El pequeño de solo tres años tomaba con fuerza las manos de sus padres Oscar y Mariela Agreda, que no podían evitar derramar lágrimas de felicidad, además de manifestar agradecimiento. La familia, proveniente de la localidad salvadoreña San Marcos, prepararon carteles de ¡Gracias Paraguay! De esta manera celebraban el alta y se mudaban al albergue del hospital pediátrico para los últimos estudios antes de volver a su país. Al salir del sector esterilizado donde el pequeño estaba internado, la familia Agreda se encontró con la ministra de Salud Pública, doctora María Teresa Barán, con quien ya se habían reunido semanas atrás durante el tratamiento del pequeño. “Doy gracias a Dios y a Paraguay, a todos los médicos y enfermeras que trataron a mi hijo. Gracias ministra por abrirnos las puertas. Gracias a mi Dios, porque solo un milagro permitió que llegáramos aquí”, dijo Mariela mientras se dirigía a la titular de la cartera sanitaria, quien dio todo el mérito a los profesionales del Acosta Ñu. Agregó que apenas su hijo fue diagnosticado con Síndrome de Wiskott Aldrich, por lo que necesitaría un trasplante de médula para seguir viviendo, y ante la imposibilidad de un tratamiento adecuado en su país, comenzaron a pedir ser atendidos en hospitales pediátricos de Estados Unidos, Canadá, Francia y Alemania, no teniendo respuestas positivas. “A través de las redes sociales, el tío de Jeremy se enteró del caso de Isaías, que tenía el mismo problema que mi hijo y tuvo un trasplante de células madre exitoso en este hospital. Se comunicó con la gente de acá por las redes sociales y luego de un par de intercambios de informaciones nos pidieron que vengamos. No lo podíamos creer. Al mes ya estábamos llegando a Paraguay y desde que pisamos este país el trato fue muy humano”, comentó Mariela Agreda. “Esta es la casa de ustedes. Dios permitió que vengan aquí a Paraguay y estamos muy contentos por la evolución del pequeño Jeremy. Sabemos que es muy difícil estar lejos de casa y más en estas fechas, pero aquí tienen una familia y falta poco para que vuelvan a El Salvador”, señaló la ministra Barán a la familia Agreda. Por su parte, la Dra. María Liz Benítez, jefa del Departamento de Oncohematología del hospital pediátrico, explicó que a partir de ahora el tratamiento del pequeño será ambulatorio con consultas en el hospital día del Acosta Ñu. “Esperamos ajustar algunos detalles referentes a la parte enteral de los alimentos; estamos esperando sus controles laboratoriales y entablar la conversación para hacer el control de la parte infectología que debemos hacerlo por 6 meses ya con la gente del Ministerio de Salud de El Salvador. Gracias a Dios no estamos con ninguna complicación infecciosa importante. No hemos tenido hasta ahora ningún evento de reacción de injerto contra huésped que es lo más visible en este tipo de pacientes, de hecho, vemos que la médula prendió, el trasplante funcionó porque sus plaquetas están en 250.000 después de vivir con 20.000. Si va todo bien, en unas semanas ya podríamos externar a su país de origen”, refirió. Desde el 2019, en el “Acosta Ñu” fueron efectuados 33 trasplantes de médula (alogénicos y autólogos) a pacientes con patologías de leucemia linfoblástica aguda, leucemia mieloide aguda, aplasia medular, inmunodeficiencia, linfomas de Hodgkin, linfomas no Hodgkin. Más sobre la enfermedad El Síndrome de Wiskott Aldrich se caracteriza principalmente por la incapacidad que tiene el cuerpo de protegerse de infecciones, debido a la deficiente función del sistema inmunitario. Para los cuadros de inmunodeficiencia está descrito el trasplante alogénico de células madre hematopoyéticas en médula ósea como terapia curativa de esta enfermedad, debido a que todo el sistema inmunológico se ve afectado y, al reemplazar todo ese cargamento por una médula nueva, se puede llegar a subsanar todo ese déficit con el que ya viene el paciente inmunodeficiente.