La pirotecnia es una tradición popular en muchas partes del mundo, especialmente durante las fiestas navideñas y de fin de año. Sin embargo, para las personas con autismo, los ruidos fuertes y repentinos, como los producidos por la pirotecnia, pueden ser un detonante de crisis de llanto, irritabilidad, miedo y ansiedad.
La pirotecnia podría afectar la estabilidad emocional de las personas con autismo. Los efectos aturdidores durante las explosiones que se generan, especialmente en las fiestas de fin de año, impactan en las personas con autismo, ya que puede estar presente la hipersensibilidad acústica que forma parte, en mayor o en menor medida, del espectro autista. Cabe recordar que esta población es altamente susceptible a los sonidos fuertes, ya que está presente la hipersensibilidad auditiva o hiperacusia; que se caracteriza por una sensibilidad aumentada a los sonidos habituales, los cuales pueden ser incómodos o incluso dolorosos para estas personas. Debido a esto, la pirotecnia puede ser detonante de crisis de llanto e irritabilidad, muchísima incomodidad en las personas y sus familias. Los estruendos producen inquietud, miedo y ansiedad, por lo que es ideal poder anticipar a las personas dentro de la condición del espectro autista, que en las fiestas de fin de año podría haber más sonidos molestos de lo habitual, además de la utilización de recursos como auriculares y /o música que ayuden a minimizar el impacto. A fines de diciembre, el uso de pirotecnia se vuelve masivo y es casi imposible refugiarse del ruido de las explosiones. Mientras afuera el cielo se llena de luces, destellos y estruendos, en muchos hogares se vive una profunda tensión. Además de los daños físicos que pueden producir los fuegos de artificio a quienes los manipulan, también provocan un gran estrés a muchas personas, así como a las mascotas que hoy por hoy conviven de manera cada vez más cercana a las personas. Desde la Dirección de Salud Mental del Ministerio de Salud se insta a toda la población a valorar la utilización de pirotecnia no explosiva o, mejor aún, a no utilizar pirotecnia en las celebraciones. Para estos días, recomendamos los siguientes puntos a tener en cuenta, en el caso de pirotecnia hacia la persona con Trastorno del Espectro Autista: Anticipar lo que va a ocurrir: anticipar cuándo y dónde se van a producir estos ruidos con apoyos visuales, con pictogramas o con historias sociales. Uso de auriculares: si se va a acudir a estos eventos, usar protectores auditivos que rebajen el nivel de presión acústica. Alejamiento: si sucede de manera no esperada, alejarse de la fuente de ruido.