Además de otros virus respiratorios, el SARS-CoV-2 circula entre nosotros, por lo que es fundamental protegerse con la vacuna Bivalente de dosis anual. Se recomienda usar mascarilla ante síntomas y en establecimientos de salud, lavarse las manos, cubrirse al toser o estornudar, y acudir a la consulta oportuna, así como reposar.
Teniendo en cuenta la alerta epidemiológica tras la detección de un aumento en el número de consultas por enfermedades tipo influenza (ETI) y hospitalizados por infecciones respiratorias agudas graves (IRAG), y la identificación de un incremento en la actividad de COVID-19 mediante el sistema de vigilancia de la Dirección General de Vigilancia de la Salud, se insta a toda la población a mantener los cuidados necesarios para evitar contagios, además de recibir la protección que otorga la vacunación. El comienzo de este nuevo año es también una oportunidad para estar protegido con la vacuna Bivalente contra COVID-19, que es de dosis única y anual. Protege de las formas graves de la infección, reduce las posibilidades de internación y muerte, y su aplicación es gratuita. La misma está indicada para personas de 6 años en adelante, priorizando a personas con factores de riesgo y/o comorbilidades. Consulta los vacunatorios de las regiones sanitarias y sus respectivos horarios en el siguiente enlace: https://www.vacunate.gov.py/ ¿Qué hacer para prevenir contagios? 1. Las personas con síntomas respiratorios deben usar mascarilla de forma adecuada. También es clave su utilización al acudir a los establecimientos de salud. 2. Cubrirse la boca y la nariz al toser o estornudar con la flexura interna del codo y no con la mano. 3. Lavarse las manos de forma correcta y frecuente. 4. Mantener la ventilación de ambientes. 5. No compartir utensilios. 6. Evitar entrar en contacto estrecho con personas que presenten signos de afección respiratoria como tos o estornudos. 7. Ante síntomas, acudir a la consulta médica de forma oportuna. En caso de estar contagiado: Deberá permanecer en aislamiento domiciliario y evitar acudir a actividades laborales u otros lugares públicos, especialmente en ambientes cerrados, hasta la resolución del cuadro clínico, evitando así el contacto con personas inmunocomprometidas y/o con factores de riesgo para IRAG. El reposo es según criterio del profesional médico, tras evaluación clínica del paciente.