En el marco del programa de capacitaciones en Reanimación Cardiopulmonar Básica (RCP) y correcto manejo del Desfibrilador Externo Automático (DEA), este mediodía fueron instruidos funcionarios de la Dirección de Gabinete del Ministerio de Salud Pública, actividad en la que también participó la ministra Barán.
Con estas instrucciones se busca dotar a los participantes las habilidades teóricas y prácticas para realizar la asistencia a personas que sufran un paro cardiorrespiratorio, incluyendo maniobras de RCP y uso correcto de DEA. En este sentido ya fueron capacitados para salvar vidas los agentes del Grupo Lince de la Policía Nacional, personal de centros comerciales y funcionarios de la cartera sanitaria. El objetivo de estos cursos de formación, es instruir acerca de la epidemiología de las enfermedades cardiovasculares, los factores de riesgo, el concepto de paro cardiorrespiratorio y los fundamentos del DEA y su correcta utilización. Además, se enseñan técnicas de compresiones torácicas, el manejo del DEA, así como situaciones especiales mediante el uso de muñecos de simulación y DEA trainer. La ministra de Salud Pública, doctora María Teresa Barán, compartió por varios minutos con los instructores y funcionarios que participaban de la capacitación. “Es muy importante prepararse para salvar vidas. Tenemos que tener la capacidad de saber las técnicas y conocer los elementos que podemos usar para asistir a una persona con un paro cardiorrespiratorio”, señaló. Los instructores destacaron que el conocimiento y la aplicación de las técnicas de RCP y uso correcto de DEA marcan una diferencia importante en la supervivencia de cualquier persona que sufre un paro, siempre y cuando las medidas se inicien dentro de los primeros 4 minutos de haberse producido la situación y se active el sistema integral de emergencia. Esto conforme a la cadena de supervivencia integrada por los siguientes eslabones: Primero, el reconocimiento precoz de los síntomas del PCR por parte de la población con la activación inmediata del sistema de emergencias; segundo, la aplicación precoz y adecuada de las técnicas de RCP y uso de DEA, y, por último, el inicio rápido y adecuado de las técnicas de soporte vital avanzado. El éxito en el resultado de la cadena de supervivencia requiere que todos los sectores de la sociedad se involucren, especialmente en aquellos sitios con una alta concurrencia de personas como las instituciones educativas, deportivas, comerciales, religiosas, gubernamentales, entre otros. Los instructores citaron datos estadísticos internacionales a la hora de afirmar que el paro cardiorrespiratorio ocasionado por la muerte súbita es una de las principales causas globales de muerte. Hasta el momento ya fueron entrenados un total de 589 personas, entre agentes del Grupo Lince y funcionarios de blanco y administrativos del Ministerio de Salud. Los entrenamientos están a cargo del Programa Nacional de Prevención Cardiovascular y Programa Nacional de Lesiones de Causas Externas con el apoyo de otras instituciones.