Fiebre, dolores corporales, articulares y de cabeza, así como enrojecimiento de la piel, son los síntomas que deben llevar a consultar a tiempo para un tratamiento oportuno.
La falta de consulta a tiempo y la automedicación son los responsables de las complicaciones de los cuadros de dengue. Por lo tanto, es fundamental acudir al establecimiento de salud más cercano apenas aparezcan los síntomas. Los síntomas del dengue son fiebre alta (39° C), dolores corporales, articulares y de cabeza, así como enrojecimiento de la piel. Los signos de alarma que requieren atención médica inmediata son sangrado de encías, vómitos persistentes, dolor abdominal intenso, pérdida de conciencia. Tanto el dengue, Zika como chikungunya se transmiten a través de la picadura del mosquito Aedes aegypti. Para impedir la propagación de este vector, se insta a realizar diariamente el control de criaderos de mosquitos en las viviendas y comunidades, y emplear medidas de protección, tales como el uso de repelente, mosquiteros y telas metálicas en puertas y ventanas. Sobre el uso del repelente - Se recomienda uso de repelente a partir de los dos meses de edad. - Debe contener DEET. - La concentración de DEET debe ser menos a 30 %. - En bebés menores de dos meses se indica solo uso de mosquitero en cunas, camas y carritos (cochecitos). La aplicación del repelente en niños siempre debe realizarla un adulto. Noticia Relacionada Dengue y COVID-19: estar alertas a síntomas comunes que merecen atención y cuidado