Se insiste en el uso de tapabocas ante síntomas y en la consulta oportuna, en el lavado de manos frecuente, la ventilación de ambientes y en el acceso a la vacunación anual.
Datos parciales muestran que se confirmaron 995 contagios por COVID-19 en el país, en la última semana epidemiológica (SE) 3. En este periodo se registra una alta positividad de casos del 29 %, mientras que la tasa de incidencia promedio en las últimas dos semanas es de 19 casos por 100.000 habitantes. Actualmente, Paraguay experimenta una transmisión comunitaria Nivel 1. En tanto que los niveles por departamento señalan que Asunción, Ñeembucú y Guairá presentan una alta transmisión Nivel 3; mientras que Central, Misiones y Pdte. Hayes cuentan con Nivel 2, evidenciando una transmisión moderada. En lo que respecta a la curva de hospitalizados, en la última semana se contabilizaron 94 internados por COVID-19: 91 en sala y 3 en la unidad de cuidados intensivos. En las últimas ocho semanas, el 51 % de los hospitalizados es del sexo femenino. En este periodo, el mayor porcentaje de internaciones por la infección se reporta principalmente en el grupo de los mayores de 70 años, seguido del grupo de 0 a 4 años. En cuanto a la cifra de fallecidos, en las últimas ocho semanas se registraron 68 decesos por COVID-19, de los cuales 13 corresponden a la última semana evaluada. Los mayores de 80 años representan el mayor porcentaje de defunciones. Vigilancia genómica Los últimos informes de Vigilancia Genómica, del Laboratorio Central de Salud Pública señalan que en el país se ha detectado dos subvariantes de Ómicron: XBB 1.9.2, más conocida como EG.5 o Eris que circula desde septiembre y desde diciembre se detecta B.A.2.86 y su subvariante JN1 reportado el 15 de enero de 2024. De acuerdo al informe de la OPS/OMS, el riesgo para la salud pública que representan estas variantes se evalúa actualmente como bajo a nivel global, y no se ha documentado un aumento de la gravedad o la virulencia. Importancia de la vacunación anual Las vacunas siguen siendo efectivas y la vacunación debe mantenerse como parte de las medidas de control. Se recomienda acceder a la vacunación anual contra la COVID-19, principalmente los grupos de riesgo, en personas con comorbilidades y adultos mayores de 60 años. Esta vacuna es clave para reducir el riesgo de hospitalizaciones y muertes asociadas a la enfermedad. Medidas para prevenir contagios: •Personas con síntomas respiratorios deben usar tapabocas de forma adecuada. También es clave su utilización al acudir a los establecimientos de salud. •Cubrir la boca y la nariz al toser o estornudar con la flexura interna del codo y no con la mano. •Lavar las manos de forma correcta y frecuente. •Mantener la ventilación de ambientes. •Evitar entrar en contacto estrecho con personas que presenten signos de afección respiratoria como tos o estornudos.